La Trinidad

(Mt 28, 16-20):

Trinidad de Dios. Dios es comunión de amor entre el Padre y su Hijo Jesús en el Espíritu Santo que les une. No es soledad radical. No es frialdad eterna. No es impasible e inmutable. Es un Dios afectable, porque su núcleo más íntimo, su ser compartido es amor, es amor excesivo, que no podemos imaginar, pero sí adivinar y proclamar a partir de lo vivido con Jesús por parte de sus discípulos, y por parte de cuantos le siguieron con coherencia y les llamamos santos. Un amor hasta el extremo como el de Jesús. Un amor fecundo, que es Vida y dador de vida. Es lo único que verdaderamente puede salvarnos como humanos, creer en Dios amor y vivir de Él con los hombres nuestros hermanos. Hay una palabra de Dios que recorre toda la Biblia: “Yo soy un Dios compasivo y misericordioso, lento a la cólera y rico en piedad”. ¿Hay una palabra tan grande como ésta? ¿Hay un dios tan humano como éste? ¿Hay un dios tan cercano como nuestro Dios, el Dios uno y de todos?

J.V.T.

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Imagen: La Trinidad (1632-36), José de Ribera 'El Españoleto'. Museo del Prado, Madrid.